¿Cómo afectan los nombres de dominio al SEO?
En los inicios de la optimización de los motores de búsqueda, el nombre de dominio de una web tenía un gran impacto a la hora de conseguir una posición privilegiada en los resultados.
En aquella época era muy fácil conseguir un buen posicionamiento solo con un dominio que contuviera la palabra clave principal, lo que llevó a que un gran número de sitios con un contenido de calidad dudosa alcanzaran las primeras posiciones.
Debido a esto, Google decidió darles mucha menos importancia a los nombres de los dominios.
Sin embargo, para el SEO y el marketing online, siguen siendo muy relevantes. Esto se debe a que puede afectar la tasa de clics en los resultados de búsqueda, la confianza en el sitio web o facilitar la creación de marca (más sobre esto en la siguiente sección). En consecuencia, todavía es importante elegir el nombre cuidadosamente.
Estos son algunos de los factores que debes valorar.
Comprueba tu dominio con el SEO Checker
Comprueba si el nombre de tu dominio está optimizado para SEO
Características SEO a la hora de elegir un nombre de dominio
Extensión de dominio
En la medida de lo posible, utiliza ccTLDs para el contenido concreto de cada país, ya que estos dominios de primer nivel indican a Google que el sitio es especialmente relevante para las búsquedas específicas de ese país. Esto proporciona una señal de geotargeting sólida, aunque no mejore directamente tu posicionamiento.
En esta misma línea, las terminaciones de los dominios tampoco influyen directamente ni el SEO ni en tu posicionamiento (incluyendo los nuevos TLDs regionales como .boston o .melbourne.).
Sin embargo, estas terminaciones sí pueden tener un impacto significativo en el comportamiento de los usuarios y usuarias. Muestra de ello serían terminaciones como .info, las cuales son bastante clicadas en los resultados de búsqueda de información. Por lo tanto, se puede decir que la terminación de un dominio sí que afecta, aunque sea indirectamente, a la optimización del sitio para buscadores.
Como un nombre de dominio solo puede ser ocupado por un único sitio web, puede ocurrir que ya no esté disponible para un TLD concreto.
Si este es el caso, el dominio puede estar disponible para su compra pero, antes de eso, debes comprobar si ha sido penalizado por Google en el pasado, al igual que su antigüedad (¡ojo! ten en cuenta que la edad de un dominio no es un factor directo de posicionamiento).
Peinsa que un dominio que ya ha sido penalizado por Google no es, desde luego, un buen punto de partida para el posicionamiento SEO.
Guiones y números
Hace años los guiones se utilizaban en los dominios para separar diferentes palabras. Hoy en día, Google identifica muy bien las palabras individuales de un dominio, por lo que ya no es necesario utilizarlas.
Además, demasiados guiones pueden dar un aspecto sospechoso, ya que recuerdan a aquellos en los que se encadenan muchas palabras clave que se suelen separar con guiones.
Básicamente, debes adquirir siempre el dominio deseado con y sin guiones si se compone de varias palabras. De lo contrario, corres el riesgo de que una de estas versiones sea adquirida por tu competencia o un agente de dominios. Esto, a su vez, conlleva el riesgo de que las actividades en la otra versión del dominio afecten negativamente a la imagen de tu sitio web.
El uso de números en el nombre puede ser una buena alternativa si la palabra clave principal ya no está disponible y, en ocasiones, incluir números también puede reforzar incluso a tu marca.
Palabras clave
Incluir tu palabra clave principal en el nombre del dominio no proporciona una ventaja directa en el posicionamiento, pero sí puede ayudarte de forma indirecta, por ejemplo, generando expectativas más claras o mejorando el CTR, aunque no es un requisito imprescindible.
Igualmente, evita siempre el keyword stuffing, como en dominios del tipo www.abogados-madrid-baratos-consulta.gratis.es. Google penaliza este tipo de prácticas, y además, ese tipo de dominios resultan poco confiables y pueden afectar negativamente la imagen de tu empresa.
Si tu marca ya es fuerte, no es necesario incluir palabras clave en el dominio, ya que una marca sólida y distintiva ya contribuye positivamente al posicionamiento. En cambio, si aún estás construyendo tu presencia en línea, puedes usar una palabra clave de forma sutil, aunque muchas veces resulta más efectivo optar por un dominio de marca memorable y crear páginas específicas por ciudad o servicio.
Nombres significativos
Para las empresas que aún no cuentan con una marca consolidada, también puede ser útil elegir nombres de dominio significativos que respondan a la intención de búsqueda de las usuarias/os. Si el nombre del dominio refleja claramente lo que ofrece el sitio y este cumple con las expectativas, puedes aumentar tu CTR (Click-Through Rate) en los resultados de búsqueda.
La principal desventaja de este tipo de dominios es que, si más adelante quieres ampliar tu oferta de productos o servicios, el nombre puede dejar de reflejar adecuadamente el contenido del sitio. Por eso, lo recomendable es evitar dominios demasiado específicos, ya que podrían limitar futuras expansiones.
Nombres de dominio cortos
Otro aspecto importante a considerar al elegir un dominio es su longitud. Cuanto más corto y sencillo sea, más fácil será de leer, escribir y recordar.
En general, una longitud de unos 8 caracteres puede considerarse ideal. No obstante, no se trata de una regla fija, ya que la extensión adecuada puede variar según el tipo de sitio. Lo más importante es centrarse en las usuarias/os y no en buscadores como Google o en criterios técnicos de SEO.
No abusar de los subdominios
Los subdominios pueden ser útiles si necesitas organizar ciertos contenidos, como un blog, por separado de tu sitio web principal. Sin embargo, al usarlos se generan sitios independientes, lo que puede aumentar la complejidad técnica y dividir las señales de posicionamiento.
Aunque Google suele interpretar los subdominios de forma similar a los subdirectorios, abusar de ellos puede complicar la gestión de tu sitio o dar una imagen negativa si se perciben como spam. Por eso, lo mejor es limitar su uso y recurrir a ellos solo cuando haya una necesidad técnica u organizativa clara.
Información adicional: ¿qué es un dominio exactamente?
Es lo que llamamos «dirección web» en el lenguaje cotidiano. Es la traducción de una dirección IP en palabras, lo que la hace más fácil de recordar y de usar que una larga cadena de números.
Cada dominio existente solamente puede asignarse a un solo sitio web, así que es único. Eso sí, el término dominio no debe confundirse con el término URL, ya que un dominio es solo una parte de una URL.
Consta de los siguientes componentes: dominio de nivel superior (TLD), nombre de dominio y subdominio.
Imagen: Componentes de un dominio, Autor: Seobility
- Dominio de nivel superior: un TLD también se llama extensión de dominio y puede ser específico de un país (ccTLD, como .us, .de, …) o genérico (gTLD, como .com, .net, .info, …). Además, desde hace algún tiempo existen los llamados nuevos TLD (nTLD), como .boston o .photography, que permiten una clasificación geográfica o temática más diferenciada del sitio.
- Nombre de dominio: es el nombre único de un sitio web, por ejemplo, el nombre de la empresa. Se puede elegir según las necesidades y representa la parte única de un dominio. No debe comenzar ni terminar con un guion y no permiten otros caracteres especiales.
- Subdominio: los subdominios pueden utilizarse para áreas específicas de un sitio que deben estar separadas del sitio real, como «móvil» o «blog». El subdominio más común es www, que significa world wide web. A pesar de su omnipresencia, no es necesario introducirlo en el navegador para acceder a la página.
Ampliar conocimientos
- https://es.wix.com/blog/2019/11/como-elegir-nombre-de-dominio/
- https://sebastianpendino.com/como-elegir-nombre-de-dominio/